Thursday, July 19, 2007

Manual de Cuneo para violar una doncella

Es la mujer caribeña
como la Sierra del Bohoruco,
extensión deliciosa con mil nidos,
picos que transmutan sus pezones,
explanadas que son el Cibao terso;
pero tiene su vulva salada
el Lago de Enriquillo, vellos
que son como alambradas,
como enjambres prohibidos por espinos.

Es difícil penetrar en las caluchas
del orgasmo mutuo,
en lo interno de sus cortezas de coco
dulcemente, hasta la pulpa;
hay que tener por lengua la jutía,
un roedor corazón que llueva en mayo
y desborde las lagunas de Trujín
con esperanza, con furia de su útero.

Cuando capture a una caribe que invoca
las regiones de Xingú, en cuencas del Sur
del Nuevo Mundo, aprenda del Manual
que escribo, el ars amandi;
la violencia dionisíaca de mi cingulum,
porque yo batallé con esas náyades,
conozco los secretos de su estupro.

Son hembras, paralelas a las costillas
de cualquier varón, agigantado.
Hay que ir y buscarlas en los areitos
aunque siempre andan desnudas por los montes
y, de espaldas a Ovando, seducirlas
y lanzar 70 caballos en sus rías,
trescientas tropas a sus cuerpos.

22-11-1989

No comments: